UN NUEVO MOMENTO. COMIENZA EL IDILIO CON LA LIBERTADORES
El 65 fue el año de la recuperación y probablemente el año de inflexión que llevó a Bolívar a sus éxitos históricos más relevantes. En ese grupo de dirigentes se foguearon jóvenes que hicieron historia, Lauro Ocampo, Guery Jordán, Guillermo Monje y Mario Mercado. En 1966 Bolívar hizo un doblete ganando el título de La Paz y el título nacional, lo que lo llevó en 1967 a su primera participación en la Copa Libertadores de América.
El debut copero de los celestes en 1967 llevó a jugadores como Walter Costa, Ramiro Blacutt un puntero de leyenda, Abdúl Aramayo, René Domingo Traitolay y otras grandes figuras de la época. Participó junto a 31 de Octubre de Bolivia, River Plate y Racing de Argentina y a Independiente Medellín e Independiente Santa Fe de Colombia. Terminó en el cuarto lugar entre seis equipos. Hacia fines de la década de los 60 Bolívar armó un equipo de mucho respeto con Párraga en el arco, defensores como Maldonado y sobre todo Mario Rojas uno de los mejores backs centrales que haya tenido el fútbol de Bolivia, en el medio campo Raúl Álvarez un argentino talentoso y el inolvidable René Rada que venía del mejor 31 de Octubre. Adelante estaban Blacutt, Taritolay y Coutinho.
DON MARIO
Probablemente Mario Mercado sea el más importante
dirigente del fútbol que haya tenido Bolivia. Además de su amplia labor
como empresario minero, emblemático alcalde de La Paz (1975-1978) y
militante político de ADN, condujo la Academia (bautizada así por la
calidad de su fútbol siempre como su máximo atributo) desde principios
de los años setenta hasta su muerte en un trágico accidente aéreo en
enero de 1995. Mercado estructuró un equipo
competitivo, administró el club con eficiencia (aportando de su propio
patrimonio) y equilibrio y realizó las más impactantes contrataciones
del fútbol boliviano. Los equipos celestes de la primera mitad de los
noventa fueron verdaderas constelaciones de estrellas. En el periodo
1970-1976 los celestes construyeron la base de su poder institucional de
la mano de Mercado. Uno de los logros mayores fue la construcción del estadio Libertador (28.000 espectadores) que se inauguró en 1976 en el barrio de Tembladerani, que se identificó por eso con los celestes.
Para 1976 Bolívar tenía ya una de las plantillas de mayor calidad del fútbol nacional, había descubierto a Carlos Aragonés mediocampista boliviano excepcional traído de un equipo del norte argentino, contaba con Ovidio Mezza por entonces el mejor jugador nacional, el arquero indiscutido de la selección Carlos Conrado Jiménez, Luís Gregorio Gallo, el joven Edgar Góngora, un defensor como Pablo Baldivieso y el insustituible defensor Ricardo Troncone.
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